La primavera temprana es uno de los efectos más peligrosos que se puede dar en el campo. Hoy en día, que tenemos tantos problemas con el cambio climático y que cada vez es más habitual encontrarnos con periodos extraños como por ejemplo largas sequías o veranos más adelantados, su incidencia en el campo puede ser bastante complicada.
Cuando hablamos de primavera temprana, como su propio nombre indica, quiere decir que se han estado desarrollando durante varios días las condiciones climatológicas propias de la primavera. Sin embargo, este efecto de primavera temprana evidentemente no es que se llegue a adelantar la primavera del todo, puesto que lo que puede ocurrir es que después lleguen las bajas temperaturas otra vez, propias de los meses anteriores al desarrollo de la primavera como tal.
Que efectos tiene la primavera temprana
Los efectos de esta primavera temprana son que básicamente, como te puedes imaginar, las plantas puedan llegar a florecer con anterioridad al tiempo en donde realmente lo tendrían que hacer. Esto no sería del todo malo si no hubiera una posible consecuencia futura y es que como hemos señalado, estos cambios de primavera adelantada, pueden tener lugar únicamente sobre unos días señalados y, por lo tanto, más adelante, volver de nuevo a la normalidad.
Esta vuelta a la normalidad del frío es precisamente la peligrosa, debido a que nos encontramos con las plantas o el cereal en flor y, por lo tanto, si se produce una helada, se puede acabar muriendo la cosecha. De esta forma, una primavera temprana puede llegar a terminar con toda una cosecha arruinándola por completo.
Las heladas tampoco tienen porque ocurrir ni tampoco son una consecuencia directa de la primavera temprana. De hecho, en algunos casos, la primavera puede adelantarse y ya directamente quedarse hasta el inicio del verano, por lo que las futuras heladas no son una certeza como tal que se puede tener una vez que se haya iniciado esta primavera adelantada.
Todos estos sucesos son mucho más habituales con todos los problemas que están existiendo con el cambio climático y desgraciadamente, pasan inadvertidos para muchas personas que no tienen una relación directa con el campo. A pesar de esto, se trata de un problema bastante comprometido para los agricultores y que es de difícil predicción, por lo que lo único que podemos hacer para evitarlo, es empezar a cuidar un poco más el planeta tierra.