Un agricultor siempre tiene que estar mirando al cielo, pendiente de la climatología puesto que esta puede ser tanto propicia como perjudicial para el desarrollo de su actividad. En este sentido y teniendo en cuenta la época del año en donde nos encontramos, uno de los efectos más habituales debido a las bajas temperaturas que se producen, son las heladas. Pese a que la gente pueda llegar a pensar, no todas las heladas son iguales y de esta forma, no afectan de la misma manera al campo. En este caso, tenemos que diferenciar entre las heladas blancas y las heladas negras. Vamos a conocerlas un poquito mejor y ver en que se diferencian y como afectan al campo.
Heladas blancas
Las heladas blancas se dan cuando en el ambiente existe mucho frío y también una humedad importante. En este caso, la escarcha se empieza a formar en las capas superiores de todas las plantaciones agrícolas, por lo que terminan por ofrecer un aspecto blanquecino que es el que da nombre a la helada. Estas heladas blancas, no son especialmente perjudiciales para el campo, de hecho, en algunos casos, pueden llegar a proteger la parte interna de las plantas, debido a que el hielo por irónico que parezca, consigue ejercer como elemento anticongelante de las mismas, haciendo que puedan seguir con vida y no mueran en el acto.
Heladas negras
Por otro lado, se encuentran las heladas negras. Este tipo de heladas a diferencia de las blancas, si que son bastante perjudiciales para la agricultura por lo que son bastante temidas por los agricultores. Estas heladas negras se caracterizan por que no aparece escarcha, debido a que en el ambiente apenas hay humedad, por lo que es imposible formar una condensación debido al ambiente seco.
Debido a esto, evidentemente no existe una capa de hielo sobre las plantas por lo que el frío llega de pleno a la estructura molecular de cada planta, destruyendo su tejido interno, haciendo que estas plantas se tornen de color oscuro, haciendo que se consiga la total destrucción de la planta. De nuevo, una vez más el color que termina por quedar encima del campo, es el precursor del nombre que se le otorga a la helada y como se puede ver, no todas las heladas tienen por que ser malas ya que en muchas veces, el hielo, es un fuerte aliado del campo.