Agricultura
La agricultura en Castilla y León supone un verdadero desafío para los agricultores, debido a la aridez de su clima y la altura. Además de estas condiciones, hay que sumar que toda la región, cuenta con al menos tres meses de heladas aseguradas y otros dos que son de heladas probables, lo que pone habitualmente en peligro las cosechas.
Existen más problemas como el relieve de las montañas o las temperaturas extremas, que hace que cultivar en los campos, sea un verdadero desafío. Por fortuna, los campos en Castilla y León son muy fértiles y en ellos predomina por norma general el cultivo de secano, ya que se adapta mejor al clima de la región.
A pesar de todo esto, Castilla y León es una comunidad en donde la agricultura es muy importante, gracias en parte a su gran extensión y a su superficie cultivable. Existe también una gran inversión en maquinaria y tecnología agrícola, consiguiendo que determinadas zonas de Burgos o Valladolid, sean las que más producción por hectárea consiguen, en comparación a toda España.
Ganadería
Castilla y León cuenta con una gran importancia en cuanto a la ganadería se refiere en comparación con el resto de España. En términos económicos, mueve cifras que superan a los 2.500 millones de euros.
Dentro de esta ganadería, es el sector del porcino el que ha ganado peso en comparación al del ovino en los últimos años, que era el que tradicionalmente había estado liderando a la comunidad.
Son más de tres millones de cerdos, en donde en Segovia, se cría a un tercio de todos estos animales, seguido de Salamanca que, a día de hoy, sigue recuperándose de la crisis sufrida por los ibéricos.
Por otro lado, el mayor número de vacas de España, también se encuentra en Castilla y León, un dato más que sirve para reforzar la predominancia de los castellanoleoneses en este sector, contando con cerca de un millón de ejemplares, en donde más de la mitad, se encuentran en Salamanca.
Por último, si tenemos en cuenta a todas las Comunidades Autónomas de España, es Castilla y León la única en donde el vacuno de carne ha aumentado desde el año 2007, en comparación con el resto que ha ido descendiendo poco a poco con el paso del tiempo. Castilla y León no solo resiste a los cambios, si no que además refuerza su importancia en este sector.